ARROZ CREMOSO DE BACALLAU

    ARROZ CREMOSO DE BACALAO

    Xa estamos de volta das vacacións e, polo tanto, metidos de cheo na rutina.  O traballo acumúlase en todos os aspectos e tamén están as receitas á cola de ser publicadas pero non lles dou dado saída.  Cando chega o momento de redactar e publicar xa me vence o cansanzo e penso que o día seguinte sairá mellor e así vaise encadeando un día con outro.

    O Bacallau é un peixe con moitos recursos.  Na miña casa aparece na mesa en moitas ocasións e de moitas maneiras, como xa ides vendo.  Hai pouco tempo chegou ás miñas mans un pequeno recetario que ten por protagonista dito peixe.  Houbo unha que me chamou a atención e que decidín intentar.  O resultado foi bo e o mellor é que lles gustou a todos os membros da familia, o que evita ter que facer varios pratos para telos a todos contentos.

• 500 gr de bacallau
• Aceite de oliva
• 1 cebola
• 1 pemento vermello ou verde
• 1 tomate
• 400 gr de arroz
• 50 ml de viño branco
• Auga quente
• 50 gr de manteiga
• 2 culleradas de pirixel picado
• Sal

    O bacallau podemos empregalo en migas ou ben picado, pero procuraremos que non leve demasiadas espiñas, mellor sen ningunha.

    Antes de empezar a cociñar o mellor é picar todas as verduras e telas preparadas; cebola, pemento, tomate e pirixel.  Unha vez que teñamos todo preparado a receita vai case soa, pero non permite despistes; temos que estar moi pendentes.

    Empezamos poñendo unha tarteira baixa ao lume co aceite e pasamos a cebola cun chisco de sal.  Pasados uns 10 minutos engadimos o pemento e o tomate.  Deixamos que se vaian facendo durante uns 15 minutos con lume suave.  Engadimos despois o viño branco e o arroz, deixando que se evapore o líquido.

    E o momento de incorporar o bacallau ao mesmo tempo que imos botando auga ben quente, caciño a caciño, sen deixar de remover.  Cando xa está cocido o arroz retiramos do lume e engadimos o pirixel e a manteiga.  Removemos e servimos.  Bo proveito.

    Ya estamos de vuelta de las vacaciones y, por tanto, metidos de lleno en la rutina.  El trabajo se acumula en todos los aspectos y también están las recetas a la cola para ser publicadas pero no soy capaz de darles salida con rapidez.  Cuando llega el momento de redactar y publicar ya me vence el cansancio y pienso que el día siguiente será mejor y así se va encadenando un día con otro.

    El bacalao es un pescado con muchos recursos.  En mi casa aparece en la mesa en muchas ocasiones y de muchas maneras, como ya estáis viendo.  Hace poco tiempo llegó a mis manos un pequeño recetario que tiene por protagonista a dicho pescado.  Había una que me llamó la atención y que decidí intentar.  El resultado fue bueno y lo mejor es que les gustó a todos los miembros de la familia, lo que evita tener que hacer varios platos para tenerlos contentos.

• 500 gr de bacalao
• Aceite de oliva
• 1 cebolla
• 1 pimiento rojo o verde
• 1 tomate
• 400 gr de arroz
• 50 ml de vino blanco
• Agua caliente
• 50 gr de mantequilla
• 2 cucharadas de perejil picado
• Sal

    El bacalao podemos emplearlo en migas o bien troceado, pero procuraremos que no lleve demasiadas espinas, mejor sin ninguna.

    Antes de empezar a cocinar lo mejor es picar todas las verduras y tenerlas preparadas; cebolla, pimiento, tomate y perejil. Cuando ya esté todo preparado la receta va casi sola, pero no permite despistes; tenemos que estar muy pendientes.

   
    Empezamos poniendo una cazuela baja al fuego con aceite y pasamos la cebolla con una pizca de sal.  Pasados unos 10 minutos añadimos el pimiento y el tomate.  Dejamos que se vayan haciendo durante unos 15 minutos a fuego lento.  Añadimos después el vino   blanco y el arroz, dejando que se evapore el líquido.

Es el momento de incorporar el bacalao al mismo tiempo que vamos añadiendo agua bien caliente, cacito a cacito, sin dejar de remover. Cuando ya está cocido el arroz lo retiramos del fuego y añadimos el perejil y la mantequilla. Removemos y servimos. Buen provecho.